Arco 9
Mixta y óleo sobre tela I 65 x 81 cm
ESTHER PORTA
Badalona, 1964
Se forma en la Academia de Dibujo y pintura Estudio-4 Badalona y posteriormente realiza estudios de Técnicas Murales en la Escuela de Artes y Oficios Llotja (Barcelona). Desde el año 2014 expone su obra pictórica cada fin de semana en la Muestra de Arte de la “Associació de Pintors de la Plaça del Pi”, en Barcelona. Es miembro del Grupo ART-TRA de Barcelona, formado por diez creadores de diferentes disciplinas.
El paisaje, como fuente de inspiración, es clave en la obra de tantísimos artistas que han establecido un paralelismo entre los elementos paisajísticos y distintos estados de ánimo y sentimientos. Sin duda, la naturaleza puede presumir tener un poder evocador que ha facilitado que el paisaje, como género artístico, deje de estar ligado necesariamente a lo espacial, pudiendo facilitar otras miradas como la expresión de un estado emocional.
Las obras de Esther tienen títulos como “un somni dins un somni”; “entre el cel i la terra”… Así pues, debemos entender que todos sus paisajes son lugares. Y a la vez, son pinturas, producto de un proceso pictórico, pintura sobre un lienzo creado por un proceso, suma de intelectualidad e intuición, concluyendo en una obra.
Si la pintura no es una descripción, sino una proyección de quien la ejecuta, los paisajes de Esther Porta son el reflejo de sus sentimientos, emociones, de sus propios anhelos. No en vano, el nombre de la exposición hace referencia a la poética en sí misma, sabiendo, como sabemos, que la poesía no es más que la expresión del alma.
En la búsqueda de impresiones visuales, la obra de Esther Porta se materializa en delicadas obras de colores neutros, suaves texturas y veladuras con infinidad de matices que inducen al silencio y la contemplación. Horizontes lejanos y pórticos sinuosos, resultado de un perfecto equilibrio entre cualidades formales y expresivas así como una exquisita sensibilidad estética y conceptual, sitúan las obras de Porta entre la realidad y la fantasía, porque al final sus paisajes no son más que una ilusión.
Sus paisajes y atmósferas nos invitan, más allá de una propuesta estética, a una reflexión sobre nuestro entorno natural y los sentimientos que nos inspira. Los paisajes que nunca se terminan, o las puertas que se abren a nuevos mundos posibles, nos transportan a una realidad distinta, tal vez más justa y equilibrada. En palabras de Esther “una vida que puede parecer onírica e inabarcable, pero a la vez deseable y cercana”.